Lo que surja, sin forzar nada

Bueno pues intentaré explicar más o menos lo que me trajo por este sitio a parte del aburrimiento las ganas de algo diferente, ya que todo esto es nuevo para mi.La verdad nunca me llamó todo esto la atención, tampoco confiaba mucho en estas cosas ni sentí una necesidad pero bueno ahora me apetece probar, dar una oportunidad a algo que merezca la pena y no busco nada en especial, pero me encantaría dejarme llevar con alguien de por aquí, que surja lo que tenga que surgir en cada momento y sin forzar las cosas creo que estaría guay y lo que tenga que ser, pues será así que si te apetece, aquí me tienes abierto a todo en estos, momentos para ti, para descubrir cuanto tenemos en común y compartir sobre todo buenos momentos. Estaría bien algo así no crees. Un besote enorme

hombre activo, para la actividad q sea, preferiblemente senderismo

Dalton a principios del siglo XIX, propuso como bloque elemental de la materia los átomos. A principios del siglo XX, Rutherford descubre que el átomo posee electrones en torno a un núcleo, atados por fuerzas electromagnéticas. Para investigar el núcleo se construyen los aceleradores de protones y las colisiones ponen en evidencia partículas elementales, que a mediados de los 60 se dan a conocer. Ellas tienen propiedades como masa, spin y estabilidad. Es de lo que estamos hechos

Busco a alguien con quien pasar momentos divertidos y lo que surja no soy de forzar las cosas solo dejo que todo flulla

Practico deportes: soy un excelente jugador de fútbol, soy bueno nadando, no consumo ningún tipo de drogas, soy amante de los gatos y también me encanta viajar mucho.

El amor es un sentimiento universal y poderoso que nos conecta y nos hace sentir vivos. Es una fuerza que nos impulsa a cuidar, apoyar y comprender a los demás. El amor puede manifestarse de muchas formas, ya sea en relaciones románticas, amistades profundas o incluso en el amor por uno mismo. Nos inspira a ser mejores personas y nos brinda alegría y felicidad. El amor es un regalo que debemos valorar y cultivar en nuestras vidas.

Solo puedo hablar por i.n.sta.gr.am. o w.hat.sap.p. Envíame tu nú.mero o in.sta y hablamos por allá. Hombre de 32 años proyecto de ingeniero civil. No se me resisten los problemas. Me gusta tomar decisiones y llevar la voz cantante, dominar la situación y preocuparme de invitarte a una cerveza? si quieres :) Podría decirte que busco la pareja ideal y tal, pero estaría mintiendo. No necesito una pareja para ser feliz. Necesito luchar por mis objetivos día a día, mi trabajo, mi familia y mis amigos. Lo que hoy día la gente llama "amor" yo lo llamo "dependencia". Unos a la bebida, otros a una persona. El desarrollo de la persona pasa por conformar un proyecto personal para llegar a ser el hombre que quieres ser. Y cuando seas mejor hombre que ayer, aparecerá esa persona, que no sustituirá tu proyecto de vida, sino que lo complementará sustancialmente.

Una mujer que busque momentos de vida, de pasión de alegría de gozo, de lujuria, de felicidad, de olvidar el mundo por un día, de sentir y hacer sentir de dejarme huella en mi interior por siempre. Un alma gemela mi cómplice mi complemento mi alegría y my fuerza. Y sobretodo mi locura que me vuelva loco. Y no la pueda olvidar.

Al principio diversión y lo que valla surgiendo no hay que forzar las cosas pero prefiero siempre quedar en persona

"Hay caricias que duran incluso después del roce. Hay, a veces, personas a las que la distancia no puede separar. Y escalofríos provocados por el calor de un abrazo. Aún hay sonrisas de esas que parecen cualquier otro amanecer. Algunas noches tengo la sensación de que el camino corto también puede ser el correcto. Que, por una vez, la felicidad no depende de llegar a ningún sitio, sino de disfrutar del lugar en el que estamos. Solo hay que cerrar los ojos. Cerrarlos con fuerza y acordarse de lo bonito. De la brevedad, del detalle, del momento. No se puede vivir como aquel que no recordó darse una oportunidad para ser feliz. Y agarrarse a la esperanza. Agarrarse con fuerza a las ilusiones. Y seguir. Seguir, parar, tomar aire. Respirar. Mojarnos bajo la lluvia. Y nunca, nunca creer que las cosas que se derrumban no puedan levantarse de nuevo. Nunca creer que lo triste durará más que nuestras fuerzas.